Desde nuestro blog Derecho de Familia, hemos analizado el caso de Lucía, una niña murciana de 13 años que, al no poder soportar más el acoso escolar que sufría, se ha suicidado en su casa, donde su propia madre fue quien la encontró.
El acoso comenzó hace años, cuando la pequeña tenía que escuchar todos los días como sus compañeros de instituto se burlaban de ella, llamándola fea y gorda, dos insultos que fueron calando en la autoestima de Lucía y que la han llevado al peor final posible.
La familia de Lucía, al ver que su hija estaba siendo víctima de acoso escolar, lo puso en conocimiento del instituto en el que estudiaba quienes pusieron en marcha los protocolos para tales casos. En el mes de mayo, la pequeña pudo cambiar de instituto gracias a los informes psicológicos que reflejaban la situación que estaba viviendo.
La pequeña Lucía había escrito una carta en la que anunciaba sus intenciones que fue encontrada por una limpiadora del instituto y que se la entregó al director del centro. A pesar de que sus palabras eran crudas y sus intenciones estaban claras, nadie ha podido evitar que se suicidara.
Los profesores del centro donde estudiaba Lucía han comenzado el “plan de duelo” en el que se informará a los demás alumnos de los hechos.
En estos momentos, la sección de menores de la Policía Nacional está investigando el caso, que no había sido denunciado previamente, para poder esclarecer cuanto antes si se podría haber evitado el suicidio de la menor y si existen culpables.
Ante cualquier caso de acoso escolar, hay que tomar medidas al respecto para que no continúe. El primer paso a dar es hablar con el centro educativo en el que se están produciendo los hechos. En caso que desde el centro no se den , los padres deben saber que tienen que acudir a la Policía para denunciar que su hijo está siendo víctima, acompañados siempre por un abogado experto que les ayude en un momento tan complicado.