La jueza decana de Barcelona, Dª María Sanahuja, ya manifestó públicamente su estupor en 2004 ante la proliferación de denuncias falsas en procesos de separación o divorcios. Además, mostró su reticencia ante las leyes de género y divorcio. Hasta el punto de que, en palabras suyas, se hubiera instalado “un pensamiento único que llevó a varias asociaciones a solicitar al CGPJ, en 2005, que me sancionaran y prohibieran hablar en público”.

Para leer el artículo completo, pulse en el siguiente enlace:

¿Qué tienen que ver los divorcios con las denuncias falsas?