En nuestro blog de secuestros a menores hemos reflexionado sobre una moda de lo más lamentable: la de los falsos secuestros. Y es que desde que ha comenzado el nuevo curso escolar se están produciendo casos mediante mensajes falsos que se difunden a través de redes sociales , llamadas o aplicaciones como WhatsApp en los que unos supuestos secuestradores avisan a los padres de que tienen a su hijo.
La primera alarma ha llegado mediante WhatsApp, donde se está difundiendo una imagen de unos supuestos delincuentes que atraen a los menores ofreciéndoles cromos, etc. Hay que tener ciertas precauciones a la hora de compartir este tipo de mensajes, ya que se puede generar alarma social ante un bulo de este tipo. Para ello, tanto la Policía (que en este caso ya ha desmentido el caso de los secuestradores falsos de WhatsApp) como la Guardia Civil utilizan las redes sociales para informar de los casos falsos.
Otro tipo de falso secuestro que se está produciendo es el conocido como“telesecuestro”. Se caracteriza porque se recibe una llamada en la que se informa de que uno de los menores de la familia ha sido secuestrado y se pide un rescate de entre 350 a 5.000 euros. Para dar mayor veracidad, normalmente los falsos secuestradores cuentan con un audio en el que se puede escuchar a un menor llorando y pidiendo ayuda, además de utilizar la información que se puede encontrar tanto en redes sociales como en internet sobre el menor.
Ante esta situación se debe mantener la mente fría y seguir los siguientes consejos:
- Avisar a la policía de que se ha recibido este tipo de llamada.
- Llamar al colegio en caso de que se produzca en horario escolar.
- Contactar con quien pueda estar con el menor.
- Nunca se debe pagar el rescate.
- No perder la calma.
Si queremos proteger a un menor ante un posible caso de falso secuestro es importante mantener la privacidad en las redes sociales e intentar publicar la menor información posible.